Escribir por escribir. Dibujar un panorama incandescente que permita escapar a la luz. Escribir por escribir. Porque es un día sin nombre, porque soy su nombre y la pasión de su propio desayuno. Soy la cena de este día y la locura de su vino. Soy la noche cuando llueve.
Porque escribo. Porque nazco cuando muero y muero cuando duermo. Porque sueños en el sabor de la nostalgia. Porque regreso y me regreso del destino al alejarme. Soy yo porque sigo siendo. Desvestido. Escribiendo. Besando. Soñando con saliva. Viviendo en tu sudor. Te reconozco cuando escribo. Hemos hecho tantas veces el amor.
Es hoy con sentido. Sin sentido. El delirio y la nostalgia. Es hoy. Por la prosa. Y sigo sin comprender el mundo real. Sueño en tinta. Viajo en letras. Me escondo en humo y en líquido. Aire y agua. Fuego y fe.
Es hoy. Y nos sentimos.
Por todas aquellas veces en las que hemos hecho el amor. Somos uno.